Postparto Creativo P1.

PARTE 1

La llegada de un nuevo integrante de la familia puede revolucionar nuestra mente.

Y es que estar en reposo aproximadamente 2 meses hizo que mi creatividad se estacionara y tomara unas buenas vacaciones. Fue después del parto que mi mente empezó a trabajar como suele hacerlo o aun mejor. Así que una madrugada mientras dormía a mi bebe mi mente despertaba, agarre mi celular y empece a escribir este nuevo diario o proyecto llamado "Postparto Creativo" en donde simplemente me pongo a escribir todo lo que llega a mi mente, para después poder convertirlo en arte.

Agradezco que estes leyendo estas lineas y gracias por acompañarme en este proceso, ojalá te resulte inspirador o interesante y puedas ver desde cero como funciona mi creatividad.

Y sin mas, empecemos...

Cuando tuve a Regina la primera noche que pasamos los 3 solos en el departamento fue muy difícil, enfrentarte con una bebe y una madre recién nacidas al mismo tiempo puede ser caótico. Entender que naces como madre junto con tú bebé y la que fuiste se quedó atrás es un proceso muy complicado. Aunque más adelante te reencontraras con la persona que fuiste pero en una versión mejorada, el golpe de quitarla de tajo es a veces más doloroso que el mismo parto o la misma cesárea.

Ahora tienes 2 personas que no conoces frente al espejo, una es una bebe que se gestó durante 9 meses en tu pancita que ahora teniéndola en brazos no sabes cómo ayudar, la otra es una versión nueva de ti sosteniendo en sus brazos a una bebe a la cual no sabes cómo ayudar.

Es imposible que las lágrimas no salgan a acompañar nuestra noche de insomnio, las horas cooperan haciéndose largas y la luna decide quedarse más tiempo para alumbrar tu noche.

Hasta que por fin llega el sol y comienzas a vivir un loop que crees que no tendrá fin.

Todo este proceso te fortalece como madre, te das cuenta que la maternidad no es como la pintan, que casi nadie dice la verdad y que el cuerpo es tan sabio que con el tiempo olvida cosas y dolores y decide solo quedarse con los mejores momentos, los cuales tenemos que aprender a diferenciar en esta nueva etapa, ya que es muy complicado perdernos en este laberinto llamado maternidad.

Y así arranca el camino de la madre primeriza, lleno de baches y terracería. Con lo que vamos encontrando en el camino armamos una aplanadora que nos ayuda a mejorar el camino recorrido y un pasito y medio adelante del camino a recorrer.

Pasa el tiempo y ya te acostumbraste un poco más a tu nueva personalidad, la que no duerme, la que se queja y la qué pasa por una montaña rusa de emociones diarias. Tratando de encontrar quien eras entre tanto “súper poder” que te deja el ser mamá, sigues adelante y sin darte cuenta empiezas a aparecer y a pintarte de colores una vez más.

Y así pasa el tiempo hasta que decides ser mamá una vez más.

Y ahí es donde empieza un cambio muy especial. Al creer que ya sabes todo, que ya tienes experiencia, te das cuenta que todo es nuevo otra vez, que nada se parece a lo anterior y que te enfrentas a nuevos retos pero a un nivel más complicado… es ahí donde recuerdas que lo único que si sabes ser ahora es ser Mamá, que recuerdas que tienes súper poderes especiales y que seguramente en esta nueva edición tendrás algunos upgrades en ellos y conforme subas de nivel se irán desbloqueando los nuevos.

Es ahí donde todo lo aprendido con el primer bebé empieza a brotar como una gran esfera con oxígeno integrado la cual te deja respirar tranquilamente.

Y empieza la nostalgia, el súper poder #24 se activa y te deja ver el camino que fuiste trazando comparado con el que estás trazando ahora. Ves tus aciertos, ves tus errores y ves cosas nuevas.

Llega la hora del parto y es ahí donde te reencuentras con tu vieja yo. La que no tenía nada de información, pero la veías ilusionada con su pancita, pensando e imaginando el futuro con su bebé.

La que no sabía que tendría muchos miedos de ser una buena madre se acerca a ti y te abraza para darte tranquilidad y decirte que todo va a estar bien. Y es ahí donde se fusionan y se activa el súper poder #37 y aplicas todo lo aprendido mezclado con las ilusiones y la inocencia que tenías antes de convertirte en madre.